En esta seccion dispondremos de una lista de trastornos mentales, junto con una pequeña definicion de estos y sus sintomas; esto lo hacemos para facilitarles a la hora de escoger un trastorno para su personaje o bien sea para guiarlos a la hora de rolear y sepan como hacerlo (Aceptamos sugerencias al respecto y cualquier aporte es bien recibido)
Paranoia: El trastorno de personalidad paranoica es una afección mental en la cual una persona tiene un patrón de desconfianza y recelos de los demás en forma prolongada. La persona no tiene un trastorno psicótico completo como la esquizofrenia.Las personas con un trastorno de personalidad paranoica son altamente recelosas de los demás y como resultado limitan su vida social de manera drástica. Con frecuencia sienten que están en peligro y buscan pruebas para apoyar sus sospechas. Las personas con este trastorno tienen dificultad para ver que su desconfianza es desproporcionada para su entorno.
Los síntomas comunes abarcan:
Los síntomas comunes abarcan:
- Preocupación porque los demás tengan motivos ocultos
- Creen que serán explotados (usados) por otros
- Incapacidad para trabajar junto con otros
- Aislamiento social
- Desapego
- Hostilidad
Trastorno Obsesivo Compulsivo: El trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) es un tipo de trastorno de ansiedad. Las personas con TOC, tienen pensamientos repetidos y angustiantes denominados obsesiones. Con el fin de intentar controlar estas obsesiones, las personas con TOC sienten una necesidad imperiosa de realizar rituales o comportamientos, llamados compulsiones.
Algunos ejemplos de obsesiones son el miedo a los gérmenes o el miedo a lastimarse. Entre las compulsiones se incluye lavarse las manos, contar, revisar una y otra vez las cosas o limpiar. Esos ritos y pensamientos interfieren en sus vidas diarias.
tienen pensamientos o imágenes repetidas sobre muchas cosas diferentes, como miedo a gérmenes, la suciedad o intrusos; violencia; herir a seres queridos; actos sexuales; conflictos con creencias religiosas; o higiene personal excesiva.
- realizan los mismos rituales una y otra vez tales como lavarse las manos, abrir y cerrar puertas, contar, guardar artículos innecesarios, o repetir los mismos pasos una y otra vez.
- tienen pensamientos y comportamientos indeseados que no pueden controlar.
- no obtienen placer de tales comportamientos o rituales, pero sienten un leve alivio de la ansiedad que estos pensamientos causan.
- pasan por lo menos una hora al día con estos pensamientos o rituales, los cuales causan angustia e interfieren con sus vidas cotidianas.
Bipolaridad: Es una afección mental en la cual una persona tiene cambios marcados o extremos en el estado de ánimo. Los períodos de sentirse triste o deprimido pueden alternar con períodos de sentirse muy feliz y activo o malhumorado e irritable.
La fase maníaca puede durar de días a meses. Puede incluir los siguientes síntomas:
Fácil distracción
- Participación excesiva en las actividades
- Poca necesidad de sueño
- Deficiente capacidad de discernimiento
- Control deficiente del temperamento
- Comportamientos imprudentes y falta de autocontrol, como beber, consumir drogas, tener relaciones sexuales con muchas parejas, apostar y hacer gastos exagerados
- Estado de ánimo muy irritado, pensamientos apresurados, hablar mucho y tener creencias falsas acerca de sí mismo o de sus capacidades
- El episodio depresivo puede incluir estos síntomas:
- Tristeza o estado de ánimo deprimido diariamente
- Problemas para concentrarse, recordar o tomar decisiones
- Problemas en la alimentación como inapetencia y pérdida de peso o consumo exagerado de alimentos y aumento de peso
- Fatiga o desgano
- Sentimientos de minusvalía, desesperanza o culpa
- Pérdida del placer de realizar actividades que alguna vez disfrutaba
- Pérdida de la autoestima
- Pensamientos de muerte o suicidio
- Dificultad para conciliar el sueño o dormir demasiado
- Alejarse de los amigos o las actividades que alguna vez disfrutaba
Los episodios de depresión son más frecuentes que los de manía. El patrón no es el mismo en todas las personas con trastorno bipolar:
- Los síntomas de depresión y manía pueden ocurrir juntos, lo cual se llama estado mixto.
- Los síntomas también pueden ocurrir inmediatamente uno después de otro, lo cual se denomina un ciclo rápido.
Depresión: La depresión se puede describir como el hecho de sentirse triste, melancólico, infeliz, abatido o derrumbado. La mayoría de nosotros se siente de esta manera de vez en cuando durante períodos cortosLa depresión clínica es un trastorno del estado anímico en el cual los sentimientos de tristeza, pérdida, ira o frustración interfieren con la vida diaria durante un período de algunas semanas o más.
Los síntomas de depresión abarcan:
- Estado de ánimo irritable o bajo la mayoría de las veces.
- Dificultad para conciliar el sueño o exceso de sueño.
- Cambio grande en el apetito, a menudo con aumento o pérdida de peso.
- Cansancio y falta de energía.
- Sentimientos de inutilidad, odio a sí mismo y culpa.
- Dificultad para concentrarse.
- Movimientos lentos o rápidos.
- Inactividad y retraimiento de las actividades usuales.
- Sentimientos de desesperanza y abandono.
- Pensamientos repetitivos de muerte o suicidio.
- Pérdida de placer en actividades que suelen hacerlo feliz, incluso la actividad sexual.
Trastorno de Identidad disociativo o de Multiple Personalidad: Las personas con un trastorno de identidad disociativo pueden experimentar a menudo un cuadro de síntomas que pueden parecerse a los de otros trastornos psiquiátricos. Los síntomas pueden ser similares a los de la ansiedad, de las alteraciones de la personalidad, de la esquizofrenia y de los trastornos afectivos o de la epilepsia. La mayoría de las personas sufre síntomas de depresión, ansiedad (dificultad para respirar, pulso acelerado, palpitaciones), fobias, ataques de pánico, disfunciones sexuales, alteraciones del apetito, estrés postraumático y síntomas que simulan los de las enfermedades físicas. Pueden estar preocupadas por el suicidio y son frecuentes los intentos, así como los episodios de automutilación. Muchas personas con trastorno de identidad disociativo abusan del alcohol o de las drogas en algún momento de su vida.El cambio de personalidades y la ausencia de consciencia del propio comportamiento en las otras personalidades hacen a menudo caótica la vida de una persona con este trastorno. Como las personalidades con frecuencia interactúan entre ellas, la persona dice oír conversaciones internas y las voces de otras personalidades. Esto es un tipo de alucinaciones.
Hay varios signos característicos del trastorno de la personalidad disociativo:
Las personas con un trastorno de identidad disociativo tienen típicamente una historia de tres o más diagnósticos psiquiátricos previos diferentes y que no han respondido al tratamiento. Estas personas están muy preocupadas por temas de control, tanto el autocontrol como el control de los demás.
Hay varios signos característicos del trastorno de la personalidad disociativo:
- Síntomas diferentes que ocurren en distintos momentos.
- Una capacidad fluctuante para asumir sus funciones, desde la eficacia en el trabajo y en la casa hasta la inhabilidad.
- Intensos dolores de cabeza y otros síntomas físicos.
- Distorsiones y errores en el tiempo y amnesia.
- Despersonalización y desrealización (sentimiento de estar separado de uno mismo y experimentar su medio como irreal).
Las personas con un trastorno de identidad disociativo tienen típicamente una historia de tres o más diagnósticos psiquiátricos previos diferentes y que no han respondido al tratamiento. Estas personas están muy preocupadas por temas de control, tanto el autocontrol como el control de los demás.
Delirio: Es una confusión grave y repentina debido a cambios rápidos en la actividad cerebral que ocurren con enfermedad física o mental.
El delirio implica un cambio rápido entre estados mentales (por ejemplo, desde letargo hasta agitación y luego otra vez a letargo).
Los síntomas abarcan:
- Cambios en la lucidez mental (por lo regular más alerta en la mañana, menos alerta en la noche)
- Cambios en la sensibilidad (sensación) y la percepción
- Cambios en el nivel de conciencia o conocimiento
- Cambios en el movimiento (por ejemplo, puede ser de movimiento lento o hiperactivo)
- Cambios en los patrones del sueño, somnolencia
- Confusión (desorientación) en cuanto a tiempo o lugar
- Disminución en la memoria y recuerdos a corto plazo
- Pensamiento desorganizado, como hablar de una manera que no tiene sentido
- Cambios emocionales o de personalidad, como ira, agitación, depresión, irritabilidad, euforia
- Incontinencia
- Movimientos desencadenados por cambios del sistema nervioso
- Problemas para concentrarse
Esquizofrenia: Es un trastorno mental que dificulta diferenciar lo que es real de lo que no.También dificulta pensar con claridad, tener respuestas emocionales normales y actuar de manera normal en situaciones sociales.Los síntomas generalmente se van presentando lentamente a lo largo de meses o años. La persona puede tener muchos síntomas, o solo algunos.
Las personas con esquizofrenia pueden tener dificultad para conservar amigos y para trabajar. También pueden tener problemas de ansiedad, depresión y pensamientos o comportamientos suicidas.
Los síntomas iniciales pueden incluir:
- Sentirse irritable o tenso
- Dificultad para concentrarse
- Dificultad para dormir
- Escuchar o ver cosas que no existen (alucinaciones)
- Aislamiento
- Disminución de las emociones en el tono de voz o expresión facial
- Problemas para entender y tomar decisiones
- Problemas para prestar atención y mantener la atención en las actividades
- Creencias fuertemente sostenidas que no son reales (delirios)
- Hablar de una forma que no tiene sentido
- Los pensamientos que "saltan" entre diferentes temas (asociaciones sueltas)
Sindrome de Cotard: Quien la sufre cree que sus órganos vitales internos se han paralizado, que sus intestinos no funcionan, que su corazón no late, que no tienen nervios, ni sangre ni cerebro. Imagina a sus órganos en estado de putrefacción y se ve, se huele y se siente como si esto fuera cierto. Se presentan alucinaciones visuales, como verse frente a un espejo con forma de cadáver; alucinaciones olfativas, como sentir olores desagradables, a carne en putrefacción, o alucinaciones táctiles, al sentir que tiene gusanos deslizándose sobre su piel. En sus estados más avanzados, el paciente defiende la idea de que él en verdad está muerto y de que incluso está rodeado de muertos, poniendo a personas allegadas a él en este rubro. A la par de esta creencia de muerte, el paciente mantiene una idea de inmortalidad, como si se hubiera convertido en un “alma en pena”. Aunque este es un delirio típico de las depresiones más graves, como psicóticas o delirantes, se puede ver en otras enfermedades mentales severas, como demencia con síntomas psicóticos, esquizofrenia, psicosis debidas a enfermedades médicas o a tóxicos.
Síntomas:
•Creer que han muerto.
•Negar su existencia.
•Ansiedad.
•Depresión.
•Delirios.
•Incapacidad de relacionarse con los demás y de reconocer su propia vida.
•Reconocer sabores y olores extraños.
•Creer que no tienen emociones.
Síntomas:
•Creer que han muerto.
•Negar su existencia.
•Ansiedad.
•Depresión.
•Delirios.
•Incapacidad de relacionarse con los demás y de reconocer su propia vida.
•Reconocer sabores y olores extraños.
•Creer que no tienen emociones.
Trastorno de Déficit de atención e Hiperactividad: TDAH son las siglas de Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad. Se trata de un trastorno de carácter neurológico originado en la infancia que implica un patrón de déficit de atención, hiperactividad y/o impulsividad, y que en muchas ocasiones está asociado con otros trastornos comórbidos. 1-2
Es fundamental para el diagnóstico de TDAH evaluar que estos síntomas nucleares que hemos comentado (déficit de atención, hiperactividad e impulsividad) se presenten:
El niño o adulto con TDAH presenta seis o mas de los siguientes síntomas:
· Dificultades de atención.
· Problemas de concentración.
· Problemas con la escucha.
· Problemas para terminar las tareas escolares debidos a la pérdida de cosas o por abandono de la tarea asignada.
· Dificultad para realizar diferentes tareas solicitadas por varias personas.
· No poder permanecer sentado y quieto.
· Problemas para mantener la atención por mucho tiempo enfocada en una sola cosa.
· Interrumpe mucho.
· Hablar constantemente.
. Parece desorganizado.
. Olvida las cosas.
La piromanía:
Es un trastorno psiquiátrico caracterizado por el impulso de iniciar incendios. Además el sujeto, denominado comúnmente piromaníaco o pirómano, suele sentir relajación, placer, interés, curiosidad y atracción por todo lo relacionado como pueden ser las estaciones de bombero.
El pirómano no debe ser confundido con el incendiario que es aquella persona que intencionadamente decide quemar una parcela de terreno u objetos con ánimo de lucro o simplemente por hacer daño.
Síntomas:
Comenzar un fuego entre los niños y adolescentes y la piromanía en adultos puede ser crónica o episódica. Algunas personas pueden provocar incendios con frecuencia como una forma de aliviar la tensión, otros al parecer lo hacen sólo durante los períodos de inusual de estrés en sus vidas.
*La piromanía es el responsable en un porcentaje muy pequeño de casos de incendios en los que un niño o adolescente es el sospechoso. Sin embargo, los niños de tan sólo tres años de edad pueden desarrollar la piromanía. Para que un niño sea diagnosticado como un pirómano, debe tener un historial de incendios de manera deliberada, y debe ser demostrado la fijación en el fuego no se puede atribuir a los intentos de venganza, motivos financieros, daño cerebral u otros trastornos psicológicos tales como trastorno de personalidad antisocial. Se debe demostrar que el niño tiene una atracción por el fuego y experimenta sentimientos de satisfacción o alivio después de provocar un fuego.
*La piromanía en adultos se asemeja a los de otros trastornos de control de impulsos, como los trastornos de abuso de sustancias, el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), trastornos de ansiedad y los trastornos del estado de ánimo. La piromanía en adultos se ha asociado con síntomas que incluyen depresión, pensamientos de suicidio, los conflictos repetidos en las relaciones interpersonales, y la poca capacidad para hacer frente al estrés.
Es un trastorno psiquiátrico caracterizado por el impulso de iniciar incendios. Además el sujeto, denominado comúnmente piromaníaco o pirómano, suele sentir relajación, placer, interés, curiosidad y atracción por todo lo relacionado como pueden ser las estaciones de bombero.
El pirómano no debe ser confundido con el incendiario que es aquella persona que intencionadamente decide quemar una parcela de terreno u objetos con ánimo de lucro o simplemente por hacer daño.
Síntomas:
Comenzar un fuego entre los niños y adolescentes y la piromanía en adultos puede ser crónica o episódica. Algunas personas pueden provocar incendios con frecuencia como una forma de aliviar la tensión, otros al parecer lo hacen sólo durante los períodos de inusual de estrés en sus vidas.
*La piromanía es el responsable en un porcentaje muy pequeño de casos de incendios en los que un niño o adolescente es el sospechoso. Sin embargo, los niños de tan sólo tres años de edad pueden desarrollar la piromanía. Para que un niño sea diagnosticado como un pirómano, debe tener un historial de incendios de manera deliberada, y debe ser demostrado la fijación en el fuego no se puede atribuir a los intentos de venganza, motivos financieros, daño cerebral u otros trastornos psicológicos tales como trastorno de personalidad antisocial. Se debe demostrar que el niño tiene una atracción por el fuego y experimenta sentimientos de satisfacción o alivio después de provocar un fuego.
*La piromanía en adultos se asemeja a los de otros trastornos de control de impulsos, como los trastornos de abuso de sustancias, el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), trastornos de ansiedad y los trastornos del estado de ánimo. La piromanía en adultos se ha asociado con síntomas que incluyen depresión, pensamientos de suicidio, los conflictos repetidos en las relaciones interpersonales, y la poca capacidad para hacer frente al estrés.
Se refieren, tanto a hombres como a mujeres que se enamoran de personas problemáticas o vulnerables con la esperanza de que su amor les transforme en príncipes o princesas de cuento y, al final, haya un final feliz.
Los caballeros blancos rescatan a su pareja de los dragones (problemas económicos, abuso de sustancias, depresión, una mala relación, una vida poco gratificante), creyendo así, que se generará un fuerte vínculo entre ellos. El problema es que se trata de un vínculo basado en la dependencia y cuando su pareja se recupere, sentirán que ya no les necesitan, y el caballero abandonará esa relación en busca de otra persona que necesite (y esté dispuesta a) que la rescaten.
Este comportamiento se debe a un deseo oculto. Lo que en realidad está buscando el caballero blanco, es su propio rescate. En algún momento ha vivido una pérdida o un abandono y, para esconder su vulnerabilidad, actúa mediante un mecanismo de rescate compulsivo hacia los demás.
Al principio, los caballeros, son muy seductores. Detallistas, atentos, considerados… Muestran una elevada empatía hacia los sentimientos de su pareja, con la finalidad, no de comprender al otro, sino de tomar el control.
Temen la distancia, tanto física como emocional y constantemente buscan la aprobación de su pareja para sentirse únicos y especiales. Para ello, refuerzan las debilidades de su compañero, llegando, incluso, a infantilizar a su pareja para que siga dependiendo de sus cuidados. Fácilmente muestran ataques de celos y cuando su pareja no acepta su constante despliegue de cuidados y preocupaciones, se sirven de la culpa, la crítica descarnada o, incluso, de la violencia.
La solución no es fácil y en muchas ocasiones va a requerir ayuda de un profesional. Lo más importante es asumir la responsabilidad del propio bienestar dejando de buscar que otro se responsabilice por ti.
Los caballeros blancos rescatan a su pareja de los dragones (problemas económicos, abuso de sustancias, depresión, una mala relación, una vida poco gratificante), creyendo así, que se generará un fuerte vínculo entre ellos. El problema es que se trata de un vínculo basado en la dependencia y cuando su pareja se recupere, sentirán que ya no les necesitan, y el caballero abandonará esa relación en busca de otra persona que necesite (y esté dispuesta a) que la rescaten.
Este comportamiento se debe a un deseo oculto. Lo que en realidad está buscando el caballero blanco, es su propio rescate. En algún momento ha vivido una pérdida o un abandono y, para esconder su vulnerabilidad, actúa mediante un mecanismo de rescate compulsivo hacia los demás.
Al principio, los caballeros, son muy seductores. Detallistas, atentos, considerados… Muestran una elevada empatía hacia los sentimientos de su pareja, con la finalidad, no de comprender al otro, sino de tomar el control.
Temen la distancia, tanto física como emocional y constantemente buscan la aprobación de su pareja para sentirse únicos y especiales. Para ello, refuerzan las debilidades de su compañero, llegando, incluso, a infantilizar a su pareja para que siga dependiendo de sus cuidados. Fácilmente muestran ataques de celos y cuando su pareja no acepta su constante despliegue de cuidados y preocupaciones, se sirven de la culpa, la crítica descarnada o, incluso, de la violencia.
La solución no es fácil y en muchas ocasiones va a requerir ayuda de un profesional. Lo más importante es asumir la responsabilidad del propio bienestar dejando de buscar que otro se responsabilice por ti.
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